"Sí te querían. Si no te hubiesen querido no te hubieran llevado a un lugar tan transitado y con tanta gente donde podían ser sorprendidos. Ya que sabes que en China no está permitido llevar al orfanato a los niños. Es la única manera que tienen de llevar a cabo una adopción. Te querían pero no podían hacerse cargo de tí. Ya te he explicado otras veces todo eso de la "Ley del hijo único" y de la preferencia del varón que es el que cuida a los padres cuando son mayores..."Con casi nueve años, mi hija mayor me interroga sobre su adopción de un modo distinto a como lo había hecho antes:
"Papá, ¿Por qué me abandonaron? ¿No me querían?"Por sus palabras noto que ha hecho una reflexión sobre su adopción y que al expresarse de esta manera busca una respuesta a ese
sentido de pérdida que según los expertos y muchos testimonios corroboran, todo adoptado tiene y con el que debe acostumbrase a vivir siempre.
Busca mi hija un apoyo, una comprensión a ese
¿por qué yo?
El hecho de que me pregunte es bueno, significa que comparte con confianza con sus padres las cosas que le preocupan. Le dí la respuesta que mejor supe y que encabeza este escrito.
El diálogo que antes he contado ocurrió hace algunas semanas, desde entonces ella y nosotros seguimos con nuestra normalidad cotidiana y noto que ese "por qué" , esa pieza del puzzle de su vida que no encaja, no le está causando, al menos por ahora, especiales problemas. Espero y deseo que siga siempre así.
Sabe perfectamente la historia de su adopción desde el primer minuto. Ha ido recibiendo siempre respuestas a todas sus preguntas y siempre se ha sentido satisfecha cuando le hemos respondido. Esta vez también, pero sé que volverá a preguntar y cada vez querrá saber más detalles. Espero que sepamos estar a la altura y contribuyamos a que el
sentido de pérdida sea algo perfectamente llevadero y que le permita vivir una vida plena sin que las circunstancias de su llegada a este mundo le condicionen de un modo exagerado o le lleguen a obsesionar.
Aún es pronto y son muy pequeñas (aunque la mayor tiene casi nueve años) pero pienso que, al menos por ahora empieza a dar sus frutos el cuidado que siempre hemos tenido en intentar transmitir comprensión, nunca crítica negativa, ante las circunstancias de su
"abandono" (palabra que, queramos o no, oye por todas partes y que figura en la documentación sobre su adopción y que más tarde o temprano leerá) .
También notamos que está contribuyendo a su confort emocional nuestro intento de hacerles sentir el orgullo de haber nacido en China y de tener esos rasgos que las diferencian de los otros niños que las rodean y que les llevas a preguntar por su origen con mucha frecuencia y a darles seguridad en las respuestas que deben darles.
También vemos que el hecho de que siempre (con cierta regularidad) hayan visto a otras familias como la suya (esta "subcultura de familias con hijas nacidas en China" como dice
Karin Evans en su libro "The Lost Daughters of China") , les está ayudando a integrar con normalidad la
familia distinta que somos.
Confío y espero que estemos dando los pasos apropiados y no cometamos los errores que en el pasado se cometieron cuando la sociedad no estaba tan globalizada ni se tenía acceso a tanta información sobre la adopción.
Estos días estoy leyendo (y viendo) los testimonios de personas que fueron adoptadas en Corea y que ya son adultos, en la
página web ( en inglés) de la película aún no estrenada
"Adopted: The New American Family". Es muy útil conocer estos testimonios para comprender y no caer en errores que se cometieron en el pasado ( principalmente el borrar la cultura de origen y no preparar a nuestras hijas para
"el mundo exterior") y para saber el terreno firme por donde debemos transitar en estas nuestras familias.
Coloco a continuación un artículo que mi amiga Ángeles me envió hace unas semanas y que nos puede servir de guía a los que tenemos hijas nacidas del corazón que empiezan a hacer preguntas :
"¿ QUE LES DECIMOS? (por Jane Brown)
Adoption Today Magazine, Mayo 2000
A primera vista parece contradictorio. Los expertos recomiendan
encarecidamente a los padres adoptantes ser sinceros acerca de la historia
de la adopción, pero a su vez les recomiendan no utilizar la palabra
"abandonada". Los padres de niñas nacidas en China se esfuerzan por
encontrar las palabras adecuadas que deben utilizar, pero acaban con mas
preguntas que respuestas. Se preguntan que y cuando contarles a sus hijas
sobre la separación de sus padres biológicos, y que decirles sobre como y
porque probablemente tuvo lugar. Los documentos que los padres reciben en
una adopción en China incluyen un Certificado de Abandono y se preguntan si
enseñarlo a su hija o no. Muchos padres adoptivos, en la practica, acaban
evitando o minimizando la parte de la historia anterior a que la niña se
uniera a la familia, sin saber que decir y preocupados de los próximos años
en los que será capaz de formular preguntas mas sofisticadas. ¿Cómo conducir
esta situación? ¿Que hacemos respecto de la palabra ABANDONO?
Creo que deberíamos separar el pensar en como hablar a la niña de la
historia de su adopción, del como explicarle la palabra abandono. Las niñas
necesitaran con el tiempo llegar a comprender correctamente ambos aspectos
para no tener un pasado complicado y desconocido que socave la posibilidad
de tener un futuro feliz.
Es necesario aceptar que no podemos resguardar a nuestras hijas de
sentimientos complejos sobre la perdida de su familia biológica y de su país
de origen. La perdida forma parte de la adopción tanto como la alegría.
Tristeza, vergüenza, ansiedad, inferioridad, sensación de diferencia
respecto de no adoptados, cólera, confusión, aceptación, son sentimientos
normales que los adoptados experimentan. Por tanto, una de las principales
tareas es ayudar a tu hija a desarrollar un vocabulario adecuado, para ser
capaz de designar, expresar o tratar de superar esos sentimientos, de modo
que no le dominen y se reflejen en un comportamiento destructivo. Vuestra
presencia amorosa mientras luchan contra ellos es extremadamente importante,
y decisiva en ayudarles a expresar sus sentimientos. No hay adoptado que
no crezca sin pensar y preocuparse de la perdida de sus padres biológicos.
Sin embargo, aquellos con padres adoptivos que se sienten incómodos con esa
parte de la historia, niegan su interés y ocultan sus sentimientos,
queriendo evitar sufrimiento a sus padres. Eso significa que los padres
deben querer escuchar y admitir ese tipo de sentimientos. Y significa que
también pueden presentarse en los padres.
La historia de tu hija empieza con mucha tristeza y eso entristece
con frecuencia a los padres, lo que es totalmente correcto. Una niña
mostrara sus auténticos sentimientos si los padres lo hacen con los suyos.
Recordad que si sois una familia biparental, ambos padres deben hablar con
la niña y expresar sus sentimientos sobre su pasado, para que ella pueda
pensar que ambos la aceptan junto con los fragmentos desconocidos de ese
pasado. Al ser madre adoptiva sentí gratitud y compasión por los padres
biológicos de mi hija, pero al mismo tiempo, albergue sentimientos de ira
pensando en lo que mi hija debería procesar mentalmente acerca de perderlos.
¿Por que tomaron decisiones que va a ser la causa de la lucha de su hija
contra el sufrimiento? Esto me ayudo después a entender y aceptar después
que mi hija pudiera sentir una mezcla de enfado, pesar y confusión respecto
de porque sus padres biológicos renunciaron a seguir ejerciendo de padres.
Así empezó mi lucha para acostumbrarme a la palabra abandono referida a la
adopción y ayudar a los niños a entender esa palabra y a hacer frente a los
sentimientos que origina. Aquí hay algunas ideas acerca de como hablar con
los niños sobre la historia de su adopción y como definir, explicar y hacer
frente al impacto de la palabra abandono.
Primero, asumid que como todos los padres adoptivos necesitareis
contarle la historia progresiva y repetidamente. Empezad con sus padres
biológicos. Utilizad el termino desde el principio, de modo que os
encontréis cómodos utilizándolo. Tendréis que practicar. Será mejor para
vuestra hija si lo hacéis de forma natural y si no recuerda ninguna época en
que no escuchara
el termino "padres biológicos". Empezad de forma sencilla cuando vuestra
hija sea pequeña y ampliad la historia a medida que pueda conceptualizar mas
detalles y hacer preguntas mas sofisticadas. Contad con que pierda detalles,
cometa errores al repetir ella la historia y que parte se le olvide. Lo que
hemos aprendido de adoptados adultos es que la historia de como adoptasteis
es vuestra historia, pero lo que sucedió antes que vosotros en su vida es de
gran interés para vuestra hija. Eso quiere decir que necesitareis hablar a
vuestra hija acerca del embarazo, nacimiento y de como llego al orfanato.
Aunque hablar de esto resulte incomodo, eso es lo que vuestra hija necesita
y resulta más fácil con la practica. Recordad que los errores son una parte
inevitable pero útil del proceso, puesto que ofrecen la oportunidad para
hacer preguntas y aclaraciones. Nadie ha contado o contara la historia de
una adopción a la perfección.
He aquí varios ejemplos:" Realmente no sé porque tus padres
biológicos decidieron que no podían ser tus padres para siempre, pero
existen varias posibles razones de porque no pudieron. Algunos padres
biológicos no tienen casa y no disponen de las cosas necesarias para cuidar
a un bebe o a un niño (pañales, ropa, comida o un sitio donde vivir).
Algunos padres biológicos son muy jóvenes y no están preparados (¿crees que
tu canguro de 14 años podría dar a un niño todo lo que necesita para
crecer?). Sin embargo, normalmente la causa es que ya tienen uno o dos
niños, y no se les permite según las leyes chinas criar a otro niño. Eso es
porque en China hay tanta gente que si no piden a los padres que tengan solo
uno o dos niños, no habrá suficiente para comer para todos, suficientes
casas para vivir y será un país cada vez más pobre. La única forma es tener
una ley de que solo se pueda tener un niño o dos".
Algunos padres biológicos son pobres y creen que necesitan tener un
hijo (varón) porque tradicionalmente se piensa en China (y en muchos sitios)
que un hijo es una parte permanente de la familia, mientras que una hija se
tiene solo prestada hasta que se casa y pasa a la familia de su marido. Si
tienen una hija, o a veces una segunda hija, puede que decidan intentar
tener un hijo que cuide de ellos en su vejez. Normalmente los padres
biológicos deciden que sea una hija la que acabe en un orfanato, aunque a
veces deciden que su hijo también sea cuidado en un orfanato. La mayor parte
de los padres biológicos se sienten muy tristes y desearían poder criar a
sus hijos. Se sienten muy apenados al despedirse de ellos y la mayoría
pensaran en ellos por siempre.
En China la ley prohibe a los padres llevar a su hija a un orfanato
y dejar alguna información. Por eso muchos dejan a su niña en algún lugar
donde sea encontrada y llevada a algún sitio donde cuiden de ella. Algunos
esperan y observan hasta estar seguros de que es recogida. A veces algún
amigo o familiar hace ver que encontró al bebe y lo lleva al orfanato.
Algunos dejan una nota con su bebe, pero no todos los padres biológicos
pueden leer y escribir, y por lo tanto otros no lo hacen.
La niña no entenderá todo esto hasta que pase mucho tiempo, pero a
pesar de eso, ella necesita oír su historia desde que es pequeña una y otra
vez, contada de forma sencilla y progresivamente con mas detalles. Esperad
que la niña mezcle partes de lo que le contáis, malinterprete otras y
construya teorías que suenen totalmente equivocadas. Cada vez que esto
suceda, tenéis la oportunidad de corregir lo entendido erróneamente y
ampliar lo que vuestra niña recuerda y comprende. Es un proceso que se va
desplegando en el tiempo. Contada de esta forma nunca habrá un momento en
que vuestra niña no recuerde su historia como formando una parte habitual de
las conversaciones familiares y una parte importante de la historia familiar
conjunta. Recordad también que vuestra niña necesita también información del
embarazo y el nacimiento. Si es un tema que el ponerlo en común os hace
sentir violentos o tristes, necesitáis practicar y quizás comprar algunos
libros de niños sobre el tema que os ayuden con la explicación que dar.
¿Necesitara hablar vuestra hija de como se siente de que los hijos
(varones) sean preferidos? Por supuesto. No plantear este tema a niñas que
oiran hablar de la politica del hijo unico seria dejarlos vulnerables a
pensamientos no ya de que su padres biologicos renunciaron a ella por nacer
con el genero equivocado sino de que todo un pais la dejo marchar. Si sois
alguna de las pocas familias que han adoptado un hijo de China, esto
influirá en como desarrolla su opinión de aquellos con los que comparte su
etnicidad. Por tanto este tipo de conversaciones es importante y necesario
para los chicos también. Aseguraos de que aprenden que es una mentalidad
habitual no solo en China, sino en toda Asia y en otros países. Puede
ayudarles oír que la preferencia en el genero era predominante en los
Estados Unidos también, no hace tanto tiempo, y que en algunas de sus
culturas es todavía un problema.
Cualesquiera sean las palabras que elijáis, debéis tener en cuenta como lo
que le transmitáis sobre esos padres biologicos tendrá posteriormente
influencia sobre vuestra niña. Creo que son las primeras historias que los
padres adoptivos cuentan las que marcan la pauta. Si les transmitimos el
convencimiento de que los padres biologicos eran buenas personas que tenían
problemas y que hicieron lo mejor que pudieron para su niño en
circunstancias difíciles, entonces el niño crecerá con unas bases sólidas.
Son esas primeras historias y la actitud de sus padres de aceptación o
rechazo hacia los padres biologicos el patrón con el que un adoptado analiza
una parte importante de su identidad.
Finalmente quiero compartir con vosotros mis ideas sobre como
presentar y manejar la palabra abandono. Creo que en algún momento de la
vida de la niña los padres adoptivos deben introducir y explicar esa
palabra. Como parte de una adopción en China los padres reciben un
Certificado de Abandono. Allí
esta la palabra abandono en blanco y negro. Algún día vuestro niño tendrá
ese documento en la mano. Lo que ella piense y sienta estará determinado, en
gran medida, por como le hayáis explicado la palabra abandono cuando se
refiere a una adopción china y si ella cree que describe adecuadamente como
sus padres biologicos se separaron de ella. Por lo tanto los adoptados
jóvenes deben entender abandono como un termino legal.
Es mejor si oyen por primera vez la palabra de vosotros, antes de
que oigan una versión parcial, errónea y perjudicial de otros. Es mucho más
difícil deshacer sentimientos de percepción de rechazo que proporcionar
explicaciones que permitan a vuestro niño neutralizar ideas equivocadas. Si
otros, en concreto personas con poca vista, llegan primero, vuestro niño
estará tan avergonzado, dolorido y furioso que apenas podrá escuchar lo que
tenéis que decirle sobre el termino legal "abandono".
Los padres adoptivos no pueden elegir sobre el que su niño escuche o
no la palabra abandono en algún otro lugar. Otras personas pueden utilizar
esa palabra fortuitamente sin entender realmente como los padres biologicos
se separan de sus niños en una adopción. Aunque solo tiene tres años mi hija
ya ha oído usar inapropiadamente la palabra abandono junto con censuras de
cómo los chinos no quieren a sus hijas. Otros niños, parientes, vecinos,
canguros, compañeros de colegio, niños mayores, etc., repiten lo que
aprenden de sus padres y utilizan la palabra con un niño adoptado sin ningún
cuidado. Los padres adoptivos pueden elegir no utilizar la palabra
"abandonado" cuando hablan con su niño acerca de su historia pero deben
prepararla para lo que oirá fuera de su hogar y para como le gustaría
responder cuando otros la mal empleen. De otro modo dejan a sus niños
vulnerables frente a sentimientos casi inimaginables de sufrimiento y
vergüenza.
Independientemente de las palabras que utilicen o de lo hábiles que los
padres adoptivos sean contando la historia, deben aceptar que su niño tendrá
que luchar contra sentimientos de abandono y sensación de rechazo. La
mayoría de los adoptados, si no todos, lo hacen y entonces suelen empezar a
encontrarse más incómodos hablando de la primera etapa de su vida. Los
padres pueden ayudar a sus niños si amable pero decididamente continúan
hablando con ellos de sus padres biologicos y de sus decisiones. Algunos
trabajan con un terapeuta en adopción para reconocer los momentos educativos
propicios en los que pueden ayudar al niño a ir mas allá de la conclusión
incompleta de que fueron abandonados o rechazados. Los adoptados precisan y
merecen comprender y aceptar las decisiones de sus padres biologicos y
perdonarles, aunque crean que sus padres biologicos tomaron una decisión
equivocada. Si no pueden hacerlo, su capacidad para afrontar riesgos
emocionales, para tener relaciones intimas, para confiar, puede estar en un
serio peligro.
La buena noticia es que los padres adoptivos son padres
increíblemente adaptables, enormemente motivados y extraordinariamente
comprometidos y que SON capaces de llevar a cabo esta tarea, aunque no
resulte nada fácil. Aunque el trabajo con profesionales de la adopción puede
proporcionar mucho
apoyo, animo y ayuda, resulta mejor para las niñas que sean sus padres
quienes les cuenten las cosas. Los padres se preocupan y se agobian pensando
en como acogerán sus niñas lo que ellos precisan compartir. Sin embargo, los
que encuentran el valor para los primeros intentos, especialmente los que
empiezan a tratar el tema cuando sus hijas son muy pequeñas, se dan cuenta
de que son capaces de hacer un buen trabajo. Consiguen superar sus
preocupaciones sobre como van a reaccionar y sobre como se sentirán sus
hijas, lo que les da ánimos a pensar que pueden hacerlo bien. Y lo mejor de
todo es que ponen la base para una comunicación, abierta, sincera y sin
reservas, que les será útil a ellos y a sus hijas para toda la vida.
Jane Brown, MSW, es madre de ocho hijos de edades comprendidas entre 3 y 33
años, cinco de los cuales nacieron en Korea y China. También es trabajadora
social,educadora de adopción, escritor y consultor, presenta seminarios en
toda la nación sobre paternidad adoptiva y temas relacionados. Vive en
Arizona y puede ser contactada en mjbrown@getnet.com