7.12.10
"Poesía" de Lee Chang-dong
27.11.10
El color del cristal
Sabemos que en muchas ocasiones, dependiendo del "filtro" que apliquemos ante nosotros así haremos un juicio de lo que se nos muestra y comprobamos a veces para nuestra sorpresa, que cambiando el filtro, cambiamos el juicio. Hace un par de "post" Roberto me comentaba su discrepancia ante el juicio que me merecía a mí la actitud un tanto "chinofoba" de Henning Mankell en su novela "El Chino". Mirando el asunto con atención quizás llevaba razón Roberto.
En la novela había pasajes muy "chinófilos" que en mi juicio global del libro quedaron olvidados quizás porque me dejé llevar un poco por mis ideas preconcebidas y por mi permanente alerta ante todo comentario antichino.
Algo parecido me está pasado con Dianne Wei Liang, cuya novela "Mariposas para los muertos" estoy leyendo ahora.
Ahora ya no pienso igual y leyendo con otros ojos su última novela ya no me parece que esté haciendo ningún ajuste de cuentas. He cambiando el color del cristal con el que miro. He cambiado yo.
(en inglés)
16.11.10
Miro por la ventana el cielo azul pintado de nubes...
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14.11.10
"En Andalucía no paga impuestos ni Dios" Puigcercós (ERC)
Descanso un ratito de trabajar en este domingo lluvioso por aquí por el Sur de España y me conecto a Internet para leer las últimas noticias de la jornada y ¡zas! otra mentira de un político. Es desmoralizador para mí, mi mujer, mis hijas, mis familiares y mis amigos y mis conciudadanos que trabajamos, creamos riqueza y pagamos impuestos aquí en Andalucía. Somos para lo bueno y en lo malo como cualquier pueblo, ni mejores ni peores. Somos como en cualquier otro lugar de esta Península de historia tan agitada, ni más ni menos.
Esto sólo es munición para los "guerra-civilistas" y para los "anti-catalanes" y "anti-vascos" que en los últimos años tanto están proliferando.
7.11.10
"Todas las personas se parecen a sus padres"
La imagino sentada en su mesa atenta a las explicaciones de su profesor. Es una niña curiosa y muy perspicaz. Es voluntariosa y como decimos por aquí, muy zalamera. A todos quiere agradar y con todos quiere llevarse bien. Es una niña que "cae bien" y que sabe estar en los sitios. En clase es obediente y muy trabajadora y disfruta aprendiendo y es muy querida por todos los que la rodean ; por supuesto por sus profesores. Tiene nueve años y es mi hija pequeña. Por ser ella y no otra niña , su profesor de Conocimiento del Medio, el pasado lunes se sorprendió al verla llorar en su sitio, sin apenas hacerse notar, en plena explicación y sin motivo aparente alguno. Preguntó en voz alta qué es lo que le pasaba y ella agachó la cabeza y negó con un "nada". Finalizada la clase se le acercó y en un aparte le volvió a preguntar y entonces le dijo. Es que me ha recordado a "mi historia". Entonces el profesor lo entendió todo y comenzó a sentirse mal. Intentó consolarla lo mejor que supo y más tarde , realmente compungido me contó lo ocurrido y muy sinceramente me manifestó su pesar por no haber caído en la cuenta de la singularidad de nuestra hija.
La clase iba de "La Reproducción Humana" y como ocurre desgraciadamente en muchos textos en España, para hacer comprensible los conceptos se asocia en exceso y de un modo muy simple y sin matiz alguno el hecho biológico de reproducción a la maternidad-paternidad y a la formación de la familia.
Comprendo los sentimientos de mi hija cuando leían párrafos como el que sigue o contemplaba ilustraciones con el pie de foto como las que ilustran este "post"
(Conocimiento del Medio de Cuarto de Editorial SM)
Desde siempre "su historia", "nuestra historia" ha sido vivida con la mayor naturalidad posible, convenientemente contextualizada y adaptada a la edad en cada momento. "Su historia" ha sido vivida en positivo siempre con la intención de minimizar aquellas situaciones en las que la vida le lleve a recordarla, a ponerla en primer plano; pero se comprueba que por mucha preparación que uno lleve, los sentimientos afloran y te pueden hacer sufrir cuando menos lo esperas.
Su hermana mayor, en teoría de carácter más sensible, cuando pasó por este mismo tema no expresó pesar alguno, o quizás se lo guardó para sí , lo cual me preocupa.
Nosotras, las familias formadas mediante la adopción debemos saber que por muy preparados que estemos nunca podremos reprimir los sentimientos de nuestros hijos y debemos saber que el sufrimiento íntimo, personal, siempre estará ahí y nuestra obligación es empatizar al máximo, sin minimizar y sin reprimir.
Mi hija pequeña lo pasó mal y yo, luego al saberlo sufrí con ella e intenté hacerle comprender que ese sentimiento suyo también es mío, pero lo que ella siente nunca lo sentiré yo.
Como niña inteligente y sana, no ha seguido dando vueltas al asunto y rápidamente se ocupó de otras cosas. Pero ella y yo sabemos que volverá a pasarle, volverá a pasarnos.
31.10.10
Día de Difuntos
Las nubes surcan hoy el firmamento a gran velocidad impulsadas por un fuerte viento de otoño. Caprichosas formas de oeste a este pasan ante mis ojos. Unas son blancas y otras más oscuras que a buen seguro descargarán el agua que en su interior transportan quizás no muy lejos de aquí.
Nuestra vida transcurre veloz como en el firmamento lo hacen estas efímeras nubes esta tarde.
Pienso en nuestra existencia y en como los otoños se suceden uno tras otro, en como nuestros días transcurren en una cotidianidad que se nos antoja será eterna, olvidándonos de que en realidad lo que es eterna es nuestra finitud. Así es, ha sido y será. Disfrutemos del instante y recordemos en estos días de difuntos de qué estamos hechos y a dónde volveremos.
Este verano, en la placidez de unos días anchos y luminosos pasamos una tarde por una necrópolis en Alsacia donde yacen los restos de miles de jóvenes que en la Primera Guerra Mundial dejaron su corta vida en batallas que ya nadie recuerda. Me he acordado de todo esto en una tarde gris víspera de las jornadas en las que en el mundo se honra a los que nos precedieron como un recordatorio de lo que nos espera para así no olvidar el goce con el que la vida nos regala cada día.
Li Bai, un maestro de sensibilidad poética, uno de los grandes de la humanidad, no los recuerda con este bello poema que termina con una frase que cada día quiero hacer mía y no olvidar jamás.
"...mañana iremos a remar con el cabello al viento..." Es lo que vale la pena.
24.10.10
Chinófilos y Chinófobos
Chinófilos y Chinófobos...
No hace falta ser muy listo para saber con qué grupo me identifico (seguro que como la mayoría de vosotros, amables lectores) aunque me inquieta comprobar como China cada vez es vista con más recelo por muchas personas. Los chinófobos son cada vez más y eso nos obliga a los que amamos a este país a hacer pedagogía de un modo permanente.
Leí este verano "El Chino", de Henning Mankel. Vi el título en un centro comercial justo antes de partir de viaje, y sin referencias, sin saber nada de él ni de su autor, lo compré y comencé a leerlo. El libro me atrapó al principio. La intriga está muy bien dosificada y además el relato se vuelve muy interesante cuando empieza a contar las peripecias de unos hermanos chinos que en el siglo XIX fueron llevados a los Estados Unidos como esclavos para trabajar en la construcción del ferrocarril (un hecho real este , el de culíes trabajando para la Union Pacific que yo desconocía) Empecé a devorar páginas, pero ya mediado el libro te das cuenta que las tintas empiezan a cargarse el los tópicos de siempre sobre los chinos (que no voy a repetir) y la decepción comienza a aparecer. La trama se vuelve además inverosímil y algunas cosas comienzan a chirriarme demasiado. Esta vez no abandono la lectura como tantas veces hago y sigo hasta el final, comprobando , ya sin duda alguna, como Mankel puede ser encuadrado en el grupo de los chinófobos. En esta referencia en La Vanguardia podéis comprobar a qué me refiero y haceros una idea de la novela.
¡Ay, los chinófobos...! El otro día escuché una frase al vuelo en boca de un ancianito que paseaba pacíficamente con la que supongo era su esposa y un perrito. Al pasar por un flamante bazar regentado por chinos recién inagurado dice: " ¡... tenían que ser chinos... cómo si no hubiese españoles...!"
El local está en un enorme bloque terminado hace poco, donde por ahora no vive nadie y que creo que, dadas las circunstancias económicas actuales, mucho tardará en llenarse. Parece que los primeros valientes que se atreven a invertir en este lugar y a ocupar el primer local son una familia china. Durante semanas han estado preparándose y ahora lo inauguran. En pocos días se llenará de gente. Algunos seguro que, como este señor que antes he citado, critican a los chinos y la calidad de los productos que venden pero no se resisten a entrar y comprar. Pienso en la familia que ha montado este negocio y en que van a ser los primeros que van a dar vida a este bloque tan grande repleto de pisos con las persianas echadas. Da que pensar que en este edificio, paradigma de la burbuja inmobiliaria, sean unos chinos los que empiecen a poner el dinero en movimiento y que encima sean vistos por algunos con hostilidad. El constructor y los bancos en torno a este lugar, seguro que habrán pensado que ojalá otros muchos siguiesen el ejemplo y empezasen a ocupar los otros locales...
¿Por qué mucha gente recela de aquellos que son emprenderores, que se ganan la vida honradamente y que trabajan sin descanso para prosperar y no lo hacen con todos aquellos otros que con el deseo de ganar dinero rápido, fácil y sin trabajar se dedican (como ha ocurrido hasta hace dos días) a comprar inmuebles para revender, a hipotecarse para tener más y más y así poder vender más y más ...
Me acordé de la novela que leí este verano...
¡Ay, los chinófobos!
16.10.10
Cinco Años ya
Las razones que me llevaron a crearlo en su momento eran el deseo de compartir mis gustos y mis reflexiones con aquellas personas a quienes podría interesarle. Cinco años en Internet es mucho tiempo. En su momento, en octubre de 2005, los blogs nacían y este humilde rinconcito contribuía, con sus comentarios sobre cine , libros, etc a ayudar a hacer del país de nacimiento de nuestras hijas un lugar mejor conocido, y sobre todo más querido. Ahora hay decenas de lugares interesantes donde informarse sobre China y su cultura. Miles de sitios donde fluye información de un modo constante. En este lustro transcurrido, han surgido centenares de blogs que tratan estos mismos temas y además las redes sociales se han extendido de forma geométrica. La inmediatez de este medio hace que cualquier noticia, cualquier hecho más o menos relevante tiene de inmediato su sitio en la Red, con acertados comentarios y análisis y ante los que yo poco puedo añadir (sirva de ejemplo la reciente concesión del Nobel de la Paz, que ha desencadenado una serie de acertados análisis en páginas como las de ChinoChano, ZaiChina o Aorijia)
La frecuencia de los "posts" ha ido decreciendo a medida que pasaba el tiempo, hasta llegar al punto más bajo en los últimos meses. A la llegada del verano y el comienzo del curso escolar se ha unido una cierta sensación de que las cosas más importantes que quería decir, compartir, ya están dichas. Tengo la percepción de que nada nuevo puedo aportar.29.9.10
El profesor de inglés
En esta entrevista (en inglés) Wang Gang cuenta como el recuerdo de unos niños (él entre ellos) golpeando a su maestra en aquellos terribles años de horror de la Revolución Cultural le marcaron para siempre.
Leí "El profesor de inglés" a principios de verano, más o menos en los mismos días del primer aniversario de las revueltas de Urumqi, en Xinjiang, lugar de nacimiento de Wang Gang y escenario de su novela.
Cuando hace algo más de un año hubo disturbios entre" uigures" y chinos han pude constatar una vez más como el odio que se incuba durante años, en un momento de crisis, con una chispa es suficiente para desencadenar un incendio donde todos pierden y algunos se abrasan para siempre.
¿Tan difícil es convivir? ¿Porque hay tantos que se empeñan en restar en vez de sumar?
La fascinación que el joven protagonista de esta novela siente por su profesor de inglés, es la misma que se siente por lo desconocido, por lo diferente que uno aprende, valora y llegado el caso asume o rechaza.
En tiempos de la Revolución Cultural, lo peor de las personas, lo más mezquino que muchos llevaban dentro, se hacía presente en forma de denuncia, de ostracismo, cuando no de violencia desatada hacia personas inocentes.
Estos tiempos de crisis me ponen alerta ante comportamientos que en épocas pasadas ya se vivieron y se sufrieron. El auge del nacionalismo, como refugio en tiempos de incertidumbre y miedo, el envolverse en patrias y banderas y alejarse de las personas , sobre todo de las diferentes, las que vienen de lejos, las que hablan otro idioma y tienen otros rasgos, es síntoma peligroso de decadencia, y ahí estamos ahora en nuestra vieja Europa-
En la Revolución Cultural, el saber, el conocer a otros y otra cosas era motivo de sospecha.
Cuando conoces a los demás y aprendes de ellos empiezas a cambiar y te das cuenta que tú, también eres "el otro".
Las historias de los jóvenes de Urumqi de hace cuarenta años podrían ser la de tantos otros jóvenes de hoy en día...
Un buen libro. Recomiendo su lectura.
24.9.10
Ya refresca
Ya refresca. Vamos a esperar a la luna al oeste del pabellón
de brillantes colores.
Nos acaricia el rostro el perfumado aliento de la brisa.
Hoy, por vez primera, ya no abrasa la atmósfera en la
estancia de madera de árbol de la canela.
¿Podrá alguno de nosotros cantar un poema en un palacio
de nieve?
Purísimos aromas llenan el pabellón. Las rajas de sandía
diríanse de jade.
Asciende, sola, la brillante luna que semeja una una copa
de licor.
¡Qué dulce embriaguez en la fresca noche! ...
Mas ya cae sobre el plantel tupido de bambúes un velo de
colores otoñales.
poetisa Chao Su Cheng
siglo XII , Dinastía Song
6.9.10
Sin prisa se llega lejos
Después de un"verano sabático" en cuanto a Internet se refiere, retomo este humilde rincón de la "blogosfera" para comentar las cosas que de alguna manera u otra tienen a China como elemento, si no "referente", al menos "al que referirse." Si China no fuese el país de nacimiento de mis hijas, si fuese otro, a buen seguro que casi de los mismos asuntos hablaría. Cambiamos la geografía y la época, pero no la pasión y el afecto por las gentes con las que compartimos este planeta, con sus miserias y bondades y con sus esperanzas también.
Mientras ayer pensaba a la hora del desayuno sobre qué escribir en este mi primer "post" de la temporada, escuché en la Cadena Ser a Fernando Salazar, Vicepresidente Ejecutivo del Instituto de Comercio Exterior, hablar sobre las relaciones comerciales entre España y China. Esta vez tampoco tocaba criticar a China, cuya "compra de deuda" nos ha dado aire en los peores momento de especulación financiera contra España, y sí hablar de oportunidades de negocio y de comercio.
Dijo algunas cosas interesantes y entre ellas se me quedó una frase que es toda una actitud vital, una manera de ver las cosas y que comparto completamente: decía algo así como que "para llegar lejos no hay que tener prisa". Frase conocida , antigua y de sentido común, pero sobre la que debemos volver de vez en cuando, ya que con facilidad,más de lo que quisiéramos, nos dejamos llevar por las prisas. Lo refería al mundo de los negocios, pero yo estaba pensando en nuestro reciente viaje por Europa. La frase en boca del señor Fernando Salazar, entre tostadas con mantequilla y café con leche, en la placidez de una mañana de domingo de verano, me hizo pensar en que somos una afortunada familia viajera. Y que viajamos de un modo tranquilo.
Este estío hemos hecho nada menos que 6500 km.Hemos recorrido Europa sin prisas y es cierto que así se llega lejos.
Viajamos con una ruta trazada pero sin excesivos detalles y nos paramos allá donde nos apetece. No pretendemos verlo todo y sí dejarnos enamorar por lo que de bello tienen tantos y tantos lugares.
Pienso en Marco Polo y en ese viaje de años que le hizo descubrir una civilización hasta entonces desconocida en Europa y de cuyas maravillas contó y que a las personas de mente inquieta de su tiempo les abrió la imaginación y el deseo de progresar en el conocimiento, en el comercio, en una vida mejor. Hubo un intercambio de experiencias y se abrió, un camino, una ruta (la Ruta de la Seda) que en gran medida ayudó a una Europa aún atrapada en lo peor de la Edad Media, a un despegar, a un renacer que desembocó en las décadas siguientes el esplendor del Renacimiento.
Pienso que esa es la esencia de los viajes, el descubrimiento, el aprendizaje de lo bueno de los otros y la valoración de lo ajeno y de lo propio que lo merezca.
Todo verdadero viaje es también , o sobre todo, un viaje interior. Decía el año pasado por esta época que "¿Acaso nuestro empeño en llenar nuestras horas de actividades "útiles" o su imperiosa búsqueda, descartando las "inútiles", nos aparta de la felicidad, del disfrute del instante?"
Cuando viajas sin prisa se vive el instante y se llega lejos, también por dentro.
Ya estamos de vuelta.
20.6.10
"Vivir", de Yu Hua
"El humo de las chimeneas se elevaba en volutas sobre las techumbres de las casas, disipándose y desvaneciéndose en el cielo resplandeciente de arreboles. Las llamadas de las madres a sus hijos se sucedían ininterrumpidamente. Un hombre pasó delante de mi llevando cubos de estiércol con la palanca, que iba crujiendo con su trote. Poco a poco, los campos fueron tendiendo a la quietud, los contornos se desdibujaron, el arrebol de las nubes fue extinguiéndose. Yo sabía que el crepúsculo estaba a punto de pasar, y la noche a punto de caer. Vi la tierra espaciosa mostrar su pecho sólido, en actitud de llamada. Al igual que una mujer llamando a su hija, la tierra convocaba a las tinieblas de la noche."
Así termina "¡Vivir!" de Yu Hua, cuya lectura me ha apasionado. He devorado el libro en dos tardes y sus páginas, a la par que sorprenderme y emocionarme como hacía tiempo no me ocurría con un libro, me ha hecho reflexionar sobre la capacidad de superación de la adversidad en situaciones de extrema dureza, de dolor insoportable, que podemos tener los seres humanos.
La película del mismo título que dirigió Zhang Yimou, se basa en esta novela. En el guión de la misma colaboró Yu Hua y según declara, el resultado, con ser bueno, el de una película excelente, no refleja la dureza de situaciones que el libro describe.
Confieso, que al leerlo, algunas de las situaciones que se cuentan y que en la película no aparecen, me parecieron tan horribles, tan duras de soportar para un ser humano, que no parecían creíbles, pero la realidad, a poco que uno piense en lo que ocurre en nuestro planeta y que a nosotros, cómodamente sentados en el sofá, nos llega con cifras y no con rostros, la realidad digo, supera a la ficción.
Se cuenta la vida de China en gran parte del pasado siglo a través de Fungui, el protagonista, que sobrevive a todos los infortunios y que a pesar de todo, al final de su vida, mantiene la sonrisa y ... vive.
La belleza del ocaso del día que Yu Hua describe al final del libro te hace pensar que la vida, vivir, es ésto que la novela nos cuenta, con situaciones extremas de dolor, con alegrías a veces y de vez en cuando humor. La parte de nuestra existencia que nos es dada a controlar es la que debemos cuidar, mimar en extremo, para poder hacer como el protagonista, sonreír a veces, a pesar de todo.
Página 2 (18/05/2010): El escritor chino Yu Hua, ganador del James Joyce Foundation Award
6.6.10
Un años más...
Un año más se acaba la primavera y con ella otro curso escolar.
En este tiempo, a la par que la alegría por la terminación del curso y la aproximación de las vacaciones, una cierta melancolía se apodera de mí. Echo la vista atrás y recuerdo esos primeros días de septiembre cuando todo estaba por hacer. Se vive con intensidad un tiempo que pasa deprisa, demasiado deprisa. En esas jornadas de clima y luz parecidas a las de este mes, a finales del verano, se contemplaba el nuevo curso como una hoja en blanco que ahora está ya completa, llena de anotaciones y dibujos y algún que otro tachón y unos pocos garabatos.
Es tradicional hacernos una foto con los mayores de nuestro colegio que ya nos dejan.
Ingresaron con tres añitos y ahora , entrando en la adolescencia, se marchan.
Sonrientes miran a la cámara y en sus rostros, en su desenfadada expresión quisiera ver que nuestro trabajo ha dado fruto. Nosotros, sus profesores, de una foto a otra vamos envejeciendo, siempre al lado de chicos y chicas en plena explosión de energía y futuro.
Otra primavera termina, el verano se acerca y me acuerdo de un poema de Tsui Ming Thong:
Un año, un año más,
y ya otra primavera que se aleja,
En cien años, apenas
si se ve un solo hombre de cien años.
¿Cuántas veces aún nos será dado
embriagarnos así entre las flores?
Aunque su peso en oro nos costara este vino,
aún así, ¡qué barato sería!
5.6.10
La niña de papel
31.5.10
El progreso socio económico en el siglo XXI
Se destaca el caso de China, cuyo progreso en tiempos recientes es espectacular, como paradigma de lo que ocurre en el planeta, donde los avances en salud, la planificación familiar y la ambición en la mejora del bienestar, unida a una planificación con un horizonte lejano de veinte ( y no el de los míseros tres años al que los políticos occidentales se han acostumbrado) hacen que estos países se aproximen cada vez más al pelotón de cabeza.
Wei, una joven china que interviene en este programa nos da las claves de este cambio que está cambiando el mundo.
Redes (30/05/10): Desmontando mitos sobre el mundo
23.5.10
Cine que transmite
Este fin de semana he visto “La Princesa de Nebraska” y “Mil años de oración”. Ambas películas de Wayne Wang se basan en relatos de “Los Buenos Deseos”, de Yiyun Li, cuyo libro más reciente comenté en el último “post”.
Me han encantado las dos.
Mil Años de Oración” es un bello ejercicio de reflexión sobre las relaciones de afecto entre los padres y los hijos. De como la época que te toca vivir, el lugar y el estilo de vida te condiciona en las relaciones con los que quieres. De como en el fondo de nosotros, más allá de origen, edad , lenguaje y sexo, existe la posibilidad de comunicarnos, incluso en lo más íntimo.
Es hermosa la efímera relación de amistad entre el padre de la protagonista y la señora iraní en el parque.
Conmueve el lamento del padre de la protagonista por no haber sido un buen padre y el sentimiento de culpa e impotencia que siente al comprobar que su hija no es feliz, en un lugar tan distinto y con un estilo de vida tan alejado al de China.
Película de secuencias lentas y con un delicioso ritmo que ayuda a pensar mientras contemplas a los personajes.
“La Princesa de Nebraska” la realizó Wayne Wang inmediatamente después de “Mil años de oración” , con un presupuesto muy bajo y actores no profesionales.
Intenta Wayne Wang mostrar a través de la protagonista, a una nueva generación de jóvenes chinos que no tiene ni ataduras ideológicas ni morales y que vive inmersa e interaccionando en el contexto de un mundo tecnológicamente nuevo, con lo que esto supone de cambio en el modo de relacionarse.
La película es un drama personal de una chica joven que debe tomar una decisión que marcará su vida.
El ambiente más sórdido del “Chinatown” de San Francisco, a donde la protagonista acude para abortar desde Nebraska, donde estudia, es tratado con elegancia.
La protagonista es una excelente actriz que trasmite a la perfección la sensación de desamparo, de soledad ante la presión la difícil decisión que debe tomar.
El movimiento de las cámaras, el punto de vista de éstas es de lo mejor de la película, que es casi experimental en este sentido.
Otra película que transmite.
15.5.10
"Las Puertas del Paraíso" de Yiyun Li
La semana pasada terminé la lectura de “Las Puertas del Paraí so” de Yiyun Li.
Leí hace un par de años “Los buenos deseos” y esta de ahora, su primera novela, “The Vagrants” (título original en inglés, idioma en el que escribe) es una recreación más profunda, de más calado del tema que ya apuntaba en alguno de los relatos de “Los buenos deseos” : la “Revolución Cultural” y como ésta influye en la vida de las personas.Describe esta década de la historia de China a través de las vivencias de unos personajes basados en hombres , mujeres y niños que conoció en aquellos años y en las suyas propias (Yiyun Li tenía entonces dieciséis años)
Declara esta escritora pequinesa que vive en Estados Unidos en entrevistas que ha concedido en España con motivo de la promoción del libro, que la crueldad, tan intensa en diferentes situaciones de la novela, es producto principalmente del miedo. La condición humana genera situaciones de extrema crueldad donde su desencadenante principal es el temor intenso.
De la docena de personajes de la novela, declara que se identifica con el personaje del Maestro Gu, un intelectual que ha conocido el pensamiento de occidente y que contempla con fatalismo como se desarrollan los sucesos políticos que afectan íntima, y trágicamente a sus vidas.
Es un libro duro, pero que como todos aquellos que giran en torno a las pasiones y los sentimientos más íntimos de las personas, se puede extrapolar a otros períodos históricos, otras situaciones y otras personas.
Los libros de Yiyun Li se pueden adquirir en China en el idioma original (el inglés) pero no hay traducciones, ni se ve con buenos ojos la crítica política implícita de las situaciones que se recrean de ese período nefasto, trágico, de la historia reciente de China que muchos pretenden “esconder bajo la alfombra” (sus críticos opinan que "los trapos sucios se lavan en casa") El libro es mucho más que una crítica política. Recomiendo su lectura.
12.5.10
De crisis y recortes
9.5.10
Dos años después
Hará unos dos años que, camino de casa de los abuelos en nuestra visita semanal, escucho en el programa de viajes de Onda Cero (Gente Viajera) como se critica a China sin piedad alguna. Me llamó la atención que incluso periodistas de la talla de Manuel Leguineche (al que admiro) se sumaban al coro de descalificaciones sobre el país organizador de los Juegos Olímpicos sin mucho rigor y echando mano de los tópicos más manidos. Eran los días de la campaña de boicot a los Juegos y las críticas al régimen chino arreciaban por doquier.
Se decían muchísimas tonterías y algunas verdades. Los tópicos de siempre y la cara negativa del País del Centro era lo que tocaba en ese momento.
Hoy en el mismo programa y a la misma hora, haciendo el mismo recorrido, también se habla de China, pero ahora es todo diferente.
Dos años después, la conductora de programa entrevista a sus invitados que están en Shanghai, en la inauguración de un hotel del grupo Sol Meliá. Todo son buenas palabras para la ciudad, China y sus gentes.
Una semana después de la espectacular ceremonia de inauguración de la Expo de Shanghai parece que ahora las críticas feroces a China no tocan.
Con occidente en plena crisis económico financiera, China muestra al mundo un poderío económico que desconcierta a muchos, asusta a otros y provoca respeto.
Demonizar a China no toca ahora, vaya a ser que nuestras economías necesiten de la ayuda del gigante asiático.
Hablando de la Expo de Shanghai, la ceremonia de apertura, que se puede ver en HD en Youtube, es espectacular.
Hay dos momentos que me han encantado. El primero es cuando suena la melodía “Butterfly Lovers”, que me recuerda siempre aquellos días tan emotivos en China cuando fuimos al encuentro de nuestras hijas y el otro es al final cuando la famosa Torre Perla estalla en fuegos de colores.
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