" Aquí fue la morada del rey Wu;
libre crece la hierba hoy sobre sus ruinas.
Más lejos, el inmenso palacio de los T'sing, antaño tan suntuoso y tan temido.
Todo eso fue y no es, todo llega a su término.
Los hechos y los hombres viajan hacia el morir,
como pasan las aguas del Río Azul a perderse en el mar"
Esa es la realidad humana. Admiro la valentía de quienes sincera y meditadamente no creen en la trascendencia.
ResponderEliminarComo siempre, muchas gracias por compartir tus reflexiones, José Luís.