En tiempos pasados la adopción era algo casi vergonzoso y se ocultaba y ahora afortunadamente no es así.
Los padres que tenemos niñas chinas estamos muy acostumbrados a las preguntas y comentarios que sobre la formación de nuestra familia o sobre nuestras niñas nos hace la gente. A veces estas preguntas son muy impertinentes y otras veces incluso ofensivas.
Sé que la ignorancia es atrevida y por ello, muy a menudo me tomo estas preguntas con toda la calma de la que soy capaz, y las contesto o no, dependiendo del contexto. Siempre intento ser educado y comprensivo y nunca revelo detalles íntimos de mis hijas (no tengo ningún derecho, por supuesto)
La gente hace este tipo de preguntas:
¿son adoptadas, verdad?
¿son hermanas?
¿os costó mucho? (como si fueran mercancías)
¿en China no quieren a las niñas, verdad?
¡qué suerte tienen estas niñas!
¡pobrecitas!
¡qué obra de caridad más grande habéis hecho!
¡yo adoptaría si pudiera!
¿hablan chino?
¡qué graciosa, qué bien hablan español!
…
Mis hijas, desde el principio saben de su origen y de las circunstancias por las que hemos llegado a formar una familia. Están acostumbradas a ser objeto de atención y a veces de excesiva curiosidad, pero nunca se han visto en situaciones que pudiesen causarles tristeza o dolor por algún comentario de extraños. Me preocupa que esto pueda ocurrir.
Noto que desde algunos medios de comunicación se da a la adopción un enfoque inapropiado.
Se hacen comentarios de los que se desprende la idea de que las adopciones internacionales son algo "de moda" y que hacen los países ricos en los países pobres.
Como padre de dos hijas que fueron adoptadas en China y que conoce de primera mano y muy de cerca el tema de la adopción siempre voy haciendo pedagogía e intento hacer ver a la gente, entre otras cosas, por ejemplo que , al menos en España, las familias que van a adoptar se someten a un riguroso protocolo de Idoneidad que es realizado por Psicólogos y Trabajadores Sociales y en el que la motivación para adoptar es un punto fundamental (conforme pasa el tiempo me voy dando cuenta que se debería ser más riguroso en la certificación de la idoneidad, sobre todo en cuanto a la aceptación del origen. Se debería formar más a los padres adoptivos en tener una visión más positivandel país de origen de sus niñas. En cierto modo cuando se adopta una hija, también se adopta el país de donde procede).
Les digo a la gente que ni que decir tiene que adoptar por moda o por otro motivo que no sea el de ampliar o crear una familia está contraindicado para la obtención de la Idoneidad. Me molesta que mis hijas puedan llegar a percibir en la sociedad que ellas forman parte de nuestra familia por una idea tan superficial como la de que es algo "de moda". Aunque haya personas del mundo del espectáculo, la moda, o simples famosillos que hagan comentarios inapropiados sobre la adopción, no es eso lo que piensan la inmensa mayoría de las familias que se han formado mediante la adopción.Las familias que adoptamos a nuestras hijas lo hacemos por amor simplemente, por el deseo de ampliar o formar una familia, como cualquier otra.
Y sobre China y sus circunstancias más pedagogía. Recomiendo a todos un reportaje de Nacional Geographic que se titula
China's Lost Girls, conducido por la periodista estadounidense Lisa Ling, muy didáctico y bastante riguroso en todo lo que rodea
la adopción en China.